No me chilles... que estoy afónico!

El tabaco, el consumo de bebidas alcohólicas, bebidas frías, el exceso de utilización de la voz, entre otras causas, pueden provocarnos una molesta afonía...

Algunos de los remedios caseros que podemos aplicar para ello son:

• Tomar caldos de borraja o calabacín, pues estas dos verduras son ricas en mucílagos y poseen una acción suavizante de las mucosas. 
• Hervir un vaso de agua, dejar enfriar y agregar el jugo de un limón.  Luego, hacer gárgaras dos veces al día.  
• Llenar un lavabo con agua caliente e inclinarse sobre él. Después, colocar una toalla sobre la cabeza y el lavabo, a manera de "tienda", para que se junte el vapor. Respirar por la nariz el vapor.Hacer gárgaras con una decocción de un bulbo de cebolla en una taza de leche. Para ello, se debe dejar hervir 10 minutos.
• Verter 1 cucharada de romero en una taza de agua que esté hirviendo. Tapar y dejar refrescar. Hacer gargarismos con infusión varias veces al día.

 Recomendaciones:

• Evitar fumar tabaco u otra sustancia.
• Guardar silencio o hablar en voz baja. 
• mantener límpias las vías aéreas. 
• Proteger al cuello de cambios bruscos de temperatura.

Si la afonía persistiera acuda a su médico. 

Pasas para la garganta

Cuando tengas dolor de garganta, pon un puñado de pasa a hervir en un cazo de agua duarnte 10 minutos a fuego muy lento. A continuación, colaremos y añadiremos una cuchara de miel a la infusión obtenida. Haremos gárgaras con el preparado 3 veces al día.

Congestión nasal

Para aliviar la congestión nasal... poner a hervir 250 ml de agua. Cuando este en punto de ebullición retir del fuego y añadir hojas de eucalipto. Dejaremos hervir unos minutos más y volvemos a retirar del fuego. Inhalaremos el vapor que desprende el preparado, tapándonos la cabeza con una toalla.

         

Colesterol

Para el colesterol. Licuar tomates hasta conseguir unos 200 ml de zumo, y mezclarlo con una cucharada de aceite de oliva virgen por cada 25 kg de peso de la persona que lo vaya a tomar. Dejar macerar durante la noche. A la mañana siguiente, exprimir un limón, añadirlo al zumo de tomate preparado la noche anterior. Tome el preparado por las mañanas en ayunas.